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Cara a Cara: Manque La Banca

Texo y fotografía: Ariel Valeri

Manque La Banca, el músico venido de Bariloche, el cineasta, el integrante de Nunca Fui a un Parque de Diversiones, se juntó con Ariel Valeri y se puso cara a cara para ser retratado. Charlaron sobre su ciudad, su vínculo con lo mapuche, la diversidad sexual, la magia de las montañas, el ski, la libertad de transformarse y la exploración a la hora del sexo.

Como Mar del Plata, Bariloche es otra ciudad para los habitantes permanentes. Entre chocolates, perros San Bernardo y construcciones alpinas, la comarca que mira al Nahuel Huapi tiene un grado de conflicto a veces ignorado por cualquier turista desprevenido. Allí, donde el cielo puede pintarse de colores ardientes hasta que todo queda cubierto de un blanco helado, nació Manque La Banca. En la orillas del Lago Gutiérrez y en las trepadas al Cerro Viejito se encuentra el núcleo sentimental de un músico y director de cine deslumbrante: reencarnaciones, sexo anal, diversidad y barricada pop. Alguien que desde La Plata intenta mejorar un poco el mundo que le tocó vivir.

#RajemosDeAcá

“Yo nací en Bariloche, en Villa Los Cohiues, sobre el Lago Gutiérrez. Un barrio muy particular con una idiosincrasia propia, todo el mundo que lo conoce lo quiere mucho. Se gestó en aquel exilio interior que tuvo el país, post-dictadura con el aparato represivo un poco intacto, mucha gente decidió irse a poblar otros territorios. Mi vieja nació en La Plata, mi viejo es neuquino y se conocieron en el Teatro de la Universidad de La Plata. Estudiaban música, artes plásticas”.

#UnAsuntoFamiliar

“Cuando hablo de nuestra historia personal -siempre digo “nuestra” porque lo incluyo a Antuca- tenemos una especie de simbiosis. No somos mellizos, aunque compartimos algo muy fuerte. Venimos de una familia que nunca excluyó, siempre incluyó. De hecho, el ex marido de mi vieja, Eduardo, es como un tío para nosotros, aparte de ser el padre de mi hermano mayor, Nahuel. Tuvimos libertad en términos de vínculos y relaciones, lo cual tiene pro y contras. La militancia de mis viejos era no ocultar nada, era todo respeto, pero con mucha crudeza. Las discusiones no eran atrás de la puerta, eran en frente de todos. Rollos, depresiones, problemas de guita, todo. Era una casa sin filtros».

#LasVenasAbiertas

“A Bariloche se le suma algo que no es menor: es un territorio en conflicto. Esas tierras pertenecieron a Mapuches y Tehuelches y eso es algo que, desde nuestra mirada progresista, de izquierda, inclusiva, tampoco terminamos de entender. Hay que vivirlo, porque hay un nivel de violencia social que cala muy profundo. Uno no tiene idea de lo complejo que es. Un sistema turístico que funciona a base de una mano de obra que toman de los barrios del alto, que son los barrios marginados de Bariloche. Cuando entras a la “Suiza argentina” y ves su arquitectura de casa alpina no alcanzas a ver esos barrios que tienen una descendencia de un 70 u 80 % de mapuches y tehuelches, sumado al vínculo entre Chile y Argentina. En definitiva, trabajan para las clases acomodadas de la Capital, se mantiene la colonización. Trabajan en blanco, algunos ganan buenos sueldos, ayudan a sus familias pero… no pueden acceder a esos placeres. Los chicos del Alto se crían viendo el Cerro Catedral sin poder acceder. No hay un sistema inclusivo que habilite eso. Ahora estoy en la etapa de pre-producción de una película que se llama Ski. Uno de sus temas centrales es esa estructura perversa”.

#ManqueInTheSkyWithDiamonds

“Para T.R.A.P. hice un trabajo de investigación sobre cómo se vincula el cuerpo al paisaje, cómo nos interpela a un nivel más profundo que excede a la contemplación. El paisaje hace que repienses tu vida, tus ideas y también la psicodelia que surge en esos momentos. Cuando sos pibe, en el sur, tenés distintas maneras de vivir una experiencia psicodélica: la que más conocemos es tomar drogas y pasarla bárbaro. Pero cuando sos chico y no accedes a las drogas podés subir al Cerro Viejita, el que tenemos atrás de casa, y en ese proceso de ventilación llegas arriba re loco, agitado. De repente se hacen las 6 de la tarde, empieza a caer el sol, tu respiración esta rarísima y empezás a vivir una experiencia psicodélica en tu cuerpo. Los efectos químicos de tu organismo que te producen transformaciones y es parte de nuestro cotidiano sureño que nos interpela. Pensá que en 15 minutos tenés cambios abruptos de luz en el paisaje, tenés el cielo pintado de naranja, violeta, y todo sin necesidad de un estupefaciente. Es una experiencia chamánica que tenemos los que nos criamos ahí”.

#MiNombreNoEsUnNombreMás

“Manque llama mucho la atención. El Man que la banca (risas). Significa “Cóndor” en mapuche. Manque también es una palabra francesa, así que mi nombre suena raro en todos lados. Es llamativo, pero también siempre me obligó a hablar de lo mapuche. En Alemania cuando me preguntaban terminábamos hablando de Rafael Nahuel, de Santiago Maldonado. También está la situación que dicen muchos: tus viejos te pusieron así por hippie-chics. Pero me parece una boludez rotunda, pasa por otro lado. De hecho los descendientes de mapuches tampoco me lo cuestionaron. Ellos saben quién es quién, lo tienen muy claro. Vengo de una familia de docentes, en un contexto de militancia muy fuerte. Me crié en las marchas y voy a morir en las marchas. Los mapuches saben quién se apropia de un nombre con intención comercial o banal”.

#DeslizamientoParaTodos

“Ski es una especie de proyecto donde están concluyendo un montón de ideas. Estoy con dos líneas de trabajo: una que está relacionada a la diversidad sexual y al sexo explícito, como una forma de combatir las representaciones que el capitalismo hace con los cuerpos. Quiero contrarrestar esta idea comercial del cuerpo que para mí termina calando muy profundo en las políticas. Y por otro lado hacer nuevas representaciones del territorio “Buriloche”. De alguna manera estos conflictos comienzan a unirse. Ski es un proyecto vinculado al territorio, al colonialismo, a la explotación, a la injusticia y al dolor que genera no poder acceder a determinados placeres que son increíbles, como esquiar. Por ley deberíamos todos ir a esquiar. Es un deporte que estimula el cuerpo, la creatividad. Este año volví a esquiar después de 10 años y lo reafirmo: el ski es el deporte del futuro. Tiene que ser para todos”.

#PrendamosFuegoTodo

“Ya no somos una banda de hombres. Hace más de un año que Antuca se considera una persona femenina. Ella venía con este proceso desde que sacó Une, esa unión entre su yo masculino y su yo femenino, de qué manera se trabaja, porque tenía días en donde se sentía chica, otros chico. Para todo nuestro grupo ha sido una experiencia de vida alucinante, un aprendizaje. Con sus ideas aprendo muchísimo, es una maestra. Yo todo este momento en donde se replantean los vínculos afectivos lo vivo con mucho placer, siempre me gustó el quilombo. Es muy placentero que se desarme todo”.

#Carne

“El tema de la diversidad sexual viene desde nuestro disco Mover Caníbal. La historia de un antropólogo francés que se sumergía en una tribu aislada y en ese proceso él entraba a registrar y experimenta rituales sexuales de muchísima libertad. Y se lo terminaban comiendo. Todo esto se viene gestando más atrás aún, desde una cuestión familiar. El papá de mi hermano mayor era bisexual y fue algo que se habló en casa, se compartió. Para mí se están sincronizando cosas más profundas que vienen de años. La diversidad sexual no fue nunca una consigna de la izquierda militante ni del peronismo. De hecho, el feminismo hace unos años empieza a entrar en el diálogo y en mi obra esto es un problema central”.

#LoQueNosUne

“Disfruto muchísimo mi sexualidad, estar con chicos, con chicas. Lo hombres heterosexuales pueden hacer un gran aporte: la liberación anal. En este momento de crisis hay que empezar a experimentar con el ano, es lo que nos une a los dos sexos. Y a través de ese placer desarmar las cuestiones heteronormativas del sexo. Es ante todo un placer universal sin género. El mundo del rock masculino tiene que empezar a trabajar ese costado anal, antes de hacer publicaciones en Facebook, escraches. Pasa por una cosa interna, de estar en tu casa, meterse un dedo, masturbarse, experimentarlo con tu pareja, que ella te penetre, un sexo democrático”.

#Tranformers

“En Q.E.P.D vos podés hacer una lectura sobre una relación que se termina. Pero en realidad queríamos trabajar una idea de transformación: como seres humanos, poder matarnos como queremos y renacer de otra forma. Una especie de resurrección en la que creemos como banda, por eso quisimos dejar constancia de eso. La idea de la tumba era eso, Nunca Fui a un Parque de Diversiones fue esto, ahora nos podemos convertir en lo que queramos, tenemos libertad de transformarnos”.

Ariel nació en General Roca pero ya vivió más años en La Plata. Pasó por la Facultad de Periodismo de la UNLP con la firme convicción de hablar de música sin subirse jamás a un escenario. Vive con una cámara de fotos encima y trabaja en Radio Universidad, lo que para él significa un montón.