Cara a Cara: N3neca
Texto y fotografía: Ariel Valeri.
El fenómeno N3neca creció en Instagram de forma exponencial a fuerza de lo más hermoso de internet: los memes. Ariel Valeri se puso cara a cara con la creadora de la cuenta y charló sobre sus orígenes, desafiar los bordes, el perreo, el sexo, por qué no muestra la cara y si es o no una influencer.
N3neca dinamitó la tan mentada zona de confort del planeta Instagram, le puso dildos, porno remixado, política, faso y mucho, pero mucho borde. Es la cuenta “Borderqueen” a la que siguen más de 120 mil usuarios de la red social. N3neca, de alguna manera, pone a Instagram a bailar reggaetón y perrea sin descanso al ritmo del meme. Ella no tiene idea cómo pasó, pero identifica la fecha cuando todo se puso distinto y creció de forma exponencial su número de seguidores. Desde agosto del año pasado a N3neca le quieren sacar la ficha: conocer su cara. ¿Por qué no la muestra? ¿Por qué no firma sus memes? ¿Por qué no dice que algunos memes son de otres? Vamos a utilizar su frase más famosa y rendidora para explicar, de manera antropológica, qué pasa con esta chica misionera amante del chipa y la masturbación: “E´a y weno”.
#PosiciónMisionera
“De chiquita recorrí todo el litoral. Nací en Formosa, mi papá es paraguayo–formoseño y mi mamá es de Posadas. Por la crisis nos fuimos a la ciudad de Cutral Có en Neuquén porque ambos son pediatras y había cupo para que trabajen. Allí formé los vínculos más estrechos con mis amistades, aunque después volvimos a Misiones. De ahí que a mí el acento del litoral nunca se me fue, porque en casa era guaraní-misionero”.
#SerONoSer
“Me vine a La Plata hace seis años a estudiar periodismo y hasta ahora nunca pude adaptarme del todo. La conozco y no la conozco. Viví en pensiones, con mi ex, viví con amigas, me mudé muchísimas veces. Debe ser que Misiones es muy especial. Acá la gente es muy diferente, no para mal, de hecho me encanta no vivir en Misiones en este momento. Creo que tiene que ver con “sentirte parte” de la sociedad y yo me siento diferente, nunca estoy en el mismo mambo. Esto de ver a la misma gente, ir a los mismos lugares… ahora que lo pienso, lo bueno de la Facultad de Periodismo es que queda en los límites del cuadrado y conoces barrios más alejados, te perdés. Durante el curso de ingreso en el 2014 tardé un mes para encontrar el recorrido correcto. Me fascina el barrio Mondongo, ahí sí me siento en casa”.
#MemeraForever
“N3neca nace en el 2017 con la necesidad de que mi familia no vea todos los post que yo hacía. Igual esto de hacer memes venía de antes, para mí existieron siempre, desde que hay internet. Y desde antes que exista internet en mi vida, también”.
#DeProntoFlash
“No puedo pensar a N3neca en Twitter o en Facebook. No puedo materializar lo que hago en otra red social que no sea Instagram o la vida. Apenas nació n3neca me cerraron la cuenta, porque ya saben cómo soy, ya saben cómo me pongo. Entonces me enojé, me frustré, y en noviembre de ese año la volví a abrir. Y ahí quedó. Pensá que hasta agosto del año pasado yo tenía 800 seguidores y de repente puffffffffff. No sé qué pasó. Quizás porque me empezó a seguir @bylaconejachina, la emprendedora de remeras, y ella ya es influencer hace varios años. Con ella entablamos una relación amistosa de verdad, no es lobby de Instagram. No sé si es por eso o si realmente fue otra cosa, aún hoy no estoy muy segura”.
#ParaElMemeLoQueEsDelMeme
“Subo como 25 memes por día. No registro mucho, soy como una máquina que recibe memes de todos lados, los tuneo, los acomodo. mis amigues son parte de N3neca. Al principio yo mencionaba a todos los que me pasaban memes, ahora ya entendí que los memes son del pueblo. Si me los querés pasar, pasamelos, sino no me los pases. No voy a andar poniendo el autor, eso ya es una cuestión de ego. Yo el copyright lo quiero sacar de los memes. Porque los memes son el folklore de internet, son colaborativos y comunitarios. Yo no pongo “lo hizo n3neca” porque a mí eso no me sirve, no le sirve a nadie. El meme es la subversión. Nada tiene dueño, tomá, viví la vida”.
#TomarleLaLecheAlGato
“Yo no tengo la altura para apropiarme de situaciones porque “me pasó a mí entonces el meme va firmado con mi nombre”. Son situaciones banales de la vida, vivimos en Argentina, todos estamos siendo garchados por el mismo gato. No me voy a apropiar de una secuencia cuando todos estamos en la misma”.
#LaMujerSinCabeza
“Cuando llegué a los 2 mil seguidores me empecé a sorprender. Ahí caí en la cuenta de que me veía mucha gente y empecé a tapar mi cara. No tenía ganas de que me vean, hay muchos randoms en internet, hay mucha gente rara. Entonces un poquito de protección está bien. Por esto de tapar mi cara me di cuenta de que me seguían por lo que hacía y no por cómo me veía. Instagram es tan versátil, puede hacerte mierda la cabeza si vos te dejas, es totalmente hegemónico: cuerpos, rostros, vida, la forma de expresarse, las marcas”.
#DameAlgo
“A mí me chupa un huevo todo, voy a Paraguay y me compro un pantalón “Adivas” y lo pongo en mi Instagram personal. O sea, no tengo plata, soy estudiante. No me da el cuero para ser Instagramer, por eso no soy ni quiero que me tengan como tal. Soy una página de memes, eso lo quiero aclarar. Si quieren que sea influencer, denme cosas, jaaa”.
#$$$$$$
“Mi tesis de comunicación es sobre memes. A todo esto le saco el jugo por varios lados, pero todavía no vi un peso. Pero meter algo en la academia sobre memes, hacer plata con eso, vivir, materializar el trabajo, es todo muy nuevo. Hay que tener paciencia a pesar que todo va muy rápido”.
#MetocoUnToco
“Al principio los memes me ayudaron a entender la sexualidad como algo natural, el deseo, el ejercicio del placer, la masturbación femenina. Hagámonos cargo de que es algo que nos pasa, porque si no nos hacemos cargo terminamos garchando con cualquier gil, llorando años y siendo lastimadas todo el tiempo. Hablo en términos heterosexuales, pero en vínculos homosexuales pasa exactamente lo mismo. La sexualidad es algo hermoso y hay que vivirla. Es hermoso aprender, saber, el consentimiento, lo que está bien, lo que está mal. Por eso más allá de una militancia, creo que me lo estoy recordando todo el tiempo a mí misma y a mis amigas”.
#NoSeasFanática
“Hay mucho hater resentido y mucho fanático que se me viene a decir cosas. Salí, no vas a ser mi amigo así, me estás alejando de vos… “ay, por fin te conozco la cara” o me mandan capturas de historias donde se me ve la cara. Me da un poco de miedo, pero hay cosas peores. No estoy en Instagram para hacer amigos, ya los tengo y estoy muy tranquila. Me encanta recibir amor, no te lo puedo negar, pero el fanatismo es algo que no logro comprender, no me entra en la cabeza que alguien sea fan mío, porque solamente hago lo que sé hacer. Yo no soy psicóloga, no soy influencer, no soy dueña de la verdad, no soy nadie… yo no sé nada, tengo 22 años y no estoy en posición de aconsejar a nadie y menos de enseñar”.
#FuckTheTincho
“Me fijo en los likes cuando el meme me gusta mucho, pero no entro a las estadísticas. Para mí esto no es algo muy serio, aunque me encanta y estoy super agradecida. Sé que puedo sonar pedante, pero quiero ser sincera con lo que hago y con lo que soy. Me encanta tener seguidores y que se rían de mi humor y no del de un cheto de mierda, porque está lleno de Tinchos y machirulos que hacen memes”.
#MercaNo
“Tengo límites. Sé que soy border, pero tengo muchos límites y estoy contenta con ello. Chistes de merca no hago, por ejemplo. Antes que memera o instagramer o lo que sea, soy feminista. Y la merca es el canal a todo mal hacia las mujeres. Cuántas mueren empaladas por merqueros de mierda, por transas. La merca es mi limite, y sea como sea voy a encapricharme con eso: de la merca no me río”.
#AhNoTePuedoCreer
“Una de las cosas que más me enorgulleció fue cuando me empezó a seguir Luciana Peker. Ella es la persona que quiero tener como referente toda la vida. Esa mujer me enseña y yo la hago reír… ¡no lo puedo creer que me comente! Male Pichot, que nos enseñó muchísimo, también. Gente que ni siquiera quiere ser tomada como referente. Con Malena en su momento tuve muchas diferencias, pero ahora la entiendo, porque a ella la gente la pone en un lugar de mierda en donde vos tenés que ser la dueña de la verdad y en realidad estás diciendo lo que pensás y listo. Más allá de las responsabilidades obvias de cada caso, y de cómo son en cada lugar, sea Página 12 o Twitter, no es lo mismo”.
#Perriodismo
“Mi mamá está al tanto de todo esto, pero no lo entiende. No sabe cómo se genera plata o trabajo con esto. Yo tampoco, pero sé que puede pasar. Si hay algo de lo que estoy segura es que no quiero ser periodista”.